Las Jirafas tambien vuelan

- 1000 lágrimas, dijo.
Ok, no quiero vuelto, me las lloraré todas y cada una de ellas. 
-Es legítimo, respondió.
- Es lo único que puedo hacer.

La primera lágrima fue lenta
en ella rodaron los inicios como cual cinta de película que haya en su mente recordado
de esos romances europeos, poco comunes
encaprichados
con el principio confuso y dilatado
poco esperanzador.
La segunda lágrima abrió paso a un torrente desbordante,
la compuerta de una represa salada que en mi interior
resguardaba, quieta,
pronto toda su potencia desataba
en su cauce corrieron todas nuestras risas, los minutos sin tiempo y las inquietantes esperas
el roce frenético y el corazón que por la boca saldría sin preguntarme si quiera.
Dolorosa, como ella misma, me anticipó en su llegada
sus próximas aguas turbias, amargas
las que corrieron veloz por mis mejillas, sin embargo,
se sintieron livianas.
Porque nada duele mas que dejar ir la alegría.
Porque nada corre mas lento que la agonía, el rechazo, lo que se guardó
para no dejar escapar.
Lloré 999 lágrimas sin parar, la penúltima tecla del piano
el SI agudo de mi guitarra
el ultimo beso en la mejilla, mi aroma impregnado en su bufanda
dos manos sobre un cambio que por nuestra mente ni se esperaba.

Lloré casi todas las lágrimas.
Me quedó una.

Suave,
se deslizó y ha quebrado todos mis planes
al suelo lanzó todos mis peros y los hizo danzar
donde no los pudiera volver a tocar,
ni recordar.
Me siguió con la mirada
y me alejó de toda mi objetividad
me hizo flotar en su universo de cristal
me drogó con su aroma y en su pecho me hizo reposar
me hizo todo volverlo a reconsiderar
cuando yo abriendo la puerta me alejaba
he vuelto a caer a sus brazos
y cerrando los ojos con el he vuelto a soñar
una mañana de abril me vuelve a atrapar
es que en este frío solo el me sabe cobijar
porque te digo, el quiere conquistarme
y lo va a lograr
incluso si disociarme quisiera, existe la posibilidad
conoce el punto de mi sensibilidad
me conecta y desconecta,
de esta extraña realidad.
Sabe hacerme reír, hacerme girar
y me vuelve en un volcán de sensaciones
de la cabeza a los pies no existe fibra que no vuelva a vibrar.
Sí, El es todo eso,
y mucho más.

Entonces, dime cómo
reconstruir, replantear, revivir, reformar
un torbellino de cenizas inciertas
el viento viene y va
y sopla tan fuerte que no vuelvo a latir
me cuesta respirar
me puedo deshacer, desmembrar, desintegrar
y completa me entrego a la invisibilidad
me cuesta volver, me cuesta volverte a visitar
en tu mente tomar una forma mas casual
manejar el discurso sin hacerlo fatal
borrar las pesadillas y darle a este cuento
un lindo final
dibujarte un par de nubes, sol y montañas
y abajo nuestra casa fiel al estero que corre
dia y noche sin parar. (unos patos sobre los juncos)
La triste realidad: Esa no es la verdad.

Es solo un lindo cuadro que en la pared de tus sueños haz de colgar
y como siempre, yo me quedaré de atrás mirandolo, como la artista desalmada
aquella advertida mujer, siempre recordada
que vuelve cada otoño para dibujarte septiembres llenos de flores
que al oído, tu siempre la idea le dabas.
GESTOR.